
AYERBE
PUEBLOS MÁGICOS DEL ESTE DE ESPAÑA
HUESCA | ARAGÓN
La mágica historia de Ayerbe

La Noble y Fidelísima Villa de Ayerbe, títulos otorgados por Felipe V, hace justicia histórica a esta villa que desde tiempo de los romanos ha jugado un papel importante en su zona de influencia. Sorprende sus amplios espacios urbanos, especialmente la Plaza Ramón y Cajal que rinde homenaje al Nobel y que ha sido el lugar, en torno al que se han desarrollado siempre los principales eventos del municipio. El Palacio de Ayerbe, la Torre del Reloj, casas señoriales de arquitectura aragonesa, jardines y paseos en su entorno, nos invitan al disfrute de este pueblo mágico.
El devenir histórico y la propia dinámica de la economía rural, han hecho de él un pueblo que se esfuerza en recuperar la grandeza de su pasado y que es el mejor punto de partida para disfrutar del “Reino de los Mayos”, de la riqueza natural del pre-pirineo de Huesca y de disfrutar de todos los servicios que demanda el nuevo Turismo Rural, ávido de sensaciones, respetuoso con el medio ambiente y que sabe valorar la autenticidad de los productos locales, de la gastronomía y la tradición de nuestros pueblos. Cuando nos visites, cuando vuelvas, lleva contigo la magia de un pueblo antiguo, monumental, agradable al visitante, lleno de lugares para vivir experiencias mágicas. Te invitamos a conocer algunos lugares de nuestro municipio y muchos otros que podrás descubrir.
Casa solariega de arquitectura aragonesa
Palacio de los Marqueses de Urríes
Ermita de la Virgen de Casbas
LUGAR MÁGICO
Torre del Reloj
La Torre del Reloj de Ayerbe es una obra civil, de estilo barroco, erigida en 1798 – 1799 para albergar el reloj del Concejo. Corresponde a un edificio exento de casi 30 m. de altura ubicado en la plaza Baja, cerca del antiguo Ayuntamiento y del que fuera Palacio de los Marqueses de Ayerbe, resultando ser una construcción singular en las comarcas del contorno por no existir este tipo de edificaciones diferenciado de la iglesia o ayuntamiento. Desde su construcción es el techo de la villa y símbolo de la misma.
Algunos lugares que tienes que conocer… y muchos más que puedes descubrir.

Palacio de Ayerbe
El Palacio de Ayerbe, también conocido por Palacio de los Marqueses de Urriés, es una hermosa pieza de la arquitectura civil aragonesa. Está situado en el centro de la población, formando parte del frente norte de la plaza que se configuró ante él.
En su presentación actual está sustancialmente transformado. Es construcción de sillares cuidadosamente cortados, en cuya fachada se buscó cierta simetría compositiva al enmarcarla entre dos grandes torreones. La entrada es bajo gran arco de dovelas con un escudo de armas y sobre él, un reloj de sol del Siglo XVII.
El Palacio fue declarado Monumento Histórico Artístico en 1931 y Bien de Interés Cultural (B.I.C.) en 2003.

Torre de San Pedro
La Torre de San Pedro está situada al norte de la población, en una calleja sin salida.
Es un edificio adosado a edificaciones particulares, alguna de las cuales son restos de la antigua iglesia; a principios del siglo XIX, con acuerdo afirmativo del Supremo Consejo de Castilla, tuvo que ser demolida por los ayerbenses porque amenazaba inminente ruina.
El edificio de la torre es románico, del siglo XII, y fue declarado Monumento Arquitectónico-Artístico el 14 de julio de 1924.

Iglesia parroquial de San Pedro
La Iglesia de San Pedro es una construcción de sillería, sillarejo, ladrillo y tapial que ofrece obra de varias épocas. Nave de cinco tramos y capilla mayor poligonal
La decoración del interior del templo es de concepción neoclásica: pilastras y cornisas están inspiradas en el orden jónico, al que siguen con fidelidad. Hay coro a los pies sobre lunetos y con frente de arco carpanel con decoración programada, toda ella es de piedra y concentra su decoración en la portada. La portada está protegida, en el interior, por un biombo de madera, de tableros lisos. La iglesia, hoy, no tiene torre. Su fábrica es del S.XVI, conservando obras de diversas épocas. Cuenta con un museo religioso importante y un órgano, de trompetería vertical y horizontal, de mediados del S.XIX.

Ermita de la Virgen de Casbas
Se trata de una ermita con advocación a la Virgen de Nuestra Señora de Casbas que en origen fue una capilla de estilo románico y que en la actualidad es un edificio barroco del siglo XVIII. El santuario está compuesto por dos construcciones, el edificio de dependencias (vivienda del santero y estancias para los romeros) y la ermita propiamente dicha. En su interior destaca la profusa y barroca decoración pictórica de muros y bóvedas, que ofrece un programa de iconografía mariana completo, abundantes motivos vegetales, así como elementos ilusionistas de arquitecturas fingidas y trampantojos. Las pinturas, de gran colorido a base de colores primarios, se pueden datar de comienzos del siglo XVIII.

Naturaleza y Gastronomía en Ayerbe
Vivir la “Magia de Ayerbe” es disfrutar de su enclave geográfico único en la Hoya de Huesca, en el “Reino de los Mallos”, rodeado de lugares naturales mágicos como los Mallos de Riglos y Agüero, las aguas bravas del río Gállego y toda la grandeza natural del pre-Pirineo oscense.
Recorrer sus campos con los almendros en flor, subir al cerro de San Miguel, junto a la ermita de San Miguel o las ruinas del Castillo de Ayerbe, desde donde se divisan paisajes únicos. Llenar con nuestros pasos los senderos y espacios recreativos del Barranco den Fontobal, con fuentes a cada paso, es una experiencia que tienes que conocer.
Inexcusablemente has de llenarte de la magia de los sabores eternos de esta tierra, de llevar a casa, a los amigos, las tortas, el aceite de oliva, la miel de los montes de esta Villa Histórica y, como no, vivir sus fiestas y tradiciones, llenas de autenticidad.
Centro de Interpretación Ramón y Cajal
Instalado en la casa donde pasó buena parte de su infancia y juventud, es un lugar donde con paneles y objetos del Nobel podemos descubrir la vida y obra de D. Santiago Ramón y Cajal (1852-1934) Premio Nobel de Medicina y Fisiología, visitando la casa donde vivió sus mejores años en Ayerbe.