
Villanueva del Arzobispo
PUEBLOS MÁGICOS DEL SURESTE DE ESPAÑA
JAÉN | ANDALUCÍA ORIENTAL
La mágica historia de Villanueva del Arzobispo

Las historias siempre comienzan por casualidad o quizás por la voluntad de los hombres, un pueblo de Jaén olivarero, humilde, sencillo, trabajador, decidió hace más de 100 años, ser ciudad. Cerca ya de las estribaciones de la Sierra de las Villas y de Cazorla, aparece esta población, fundada por Don Pedro Tenorio, Arzobispo de Toledo.
Villanueva del Arzobispo, una histórica encrucijada entre las tierras altas de Jaén y los campos de la mancha. Sus gentes viven del olivar, del secano, del trabajo sufrido del campo, del rico aceite de oliva, del oro líquido que se transforma en la zona. Comer en esta villa, es un desafío para los sentidos, sobretodo para el gusto, platos lugareños con empaque y de gran sabor.
Naturaleza, aire puro, limpio, como es la Sierra de las Villas, dentro del Parque de Cazorla, Segura y las Villas. Sus veredas, sus caminos, sus senderos, hay que caminarlos para encontrar la paz interior. No es fácil contarte todas las lindezas de esta hermosa ciudad, ¡tendrás que venir!
Plaza Mayor
Casas solariegas
Folclore tradicional, Jota jaenera
LUGAR MÁGICO
Santuario de La Fuensanta
En el año 964, en el cercano reino de Iznatoraf, los cristianos, bajo la dominación musulmana, veneraban una imagen de Nuestra Señora la Virgen María.
El Santuario está integrado en una fortaleza medieval que data de los s. XIII-XIV y de la que aún se conservan dos torres en la estructura actual. Este Santuario está considerado uno de los más antiguos de la península.
Algunos lugares que tienes que conocer…
y muchos más que puedes descubrir.
Iglesia de San Andrés
El templo en honor a San Andrés fue declarado Bien de Interés Cultural y Patrimonio Histórico de España. Se encuentra ubicado en pleno centro histórico de la ciudad. Posee desde el siglo XVI una arquitectura con detalles militares y religiosos.
Convento de Santa Ana
El Convento de Santa Ana se encuentra situado en el casco antiguo de la ciudad. Fue Fray Domingo de Baltanás y Mexía quien donó las tierras para poder construir este convento en su día. En 1540 fundó el Convento de las Madres Dominicas de Santa Ana.
La fachada del edificio es del año 1565 y sorprende su hornacina en el centro con imagen de Santo Domingo. En el interior encontramos la Iglesia de Santa Ana y un patio con arcos y múltiples columnas de estilo Renacentista.
Iglesia de la Vera Cruz
La capilla se construyó en el siglo XVII. Los vecinos Villanovenses tienen una especial devoción por el Cristo de la Vera Cruz, en su interior, así como podemos encontrarnos otras obras escultóricas como la Virgen de la Encarnación.
Viaducto de la antigua línea férrea
El impresionante viaducto que fue construido en el año 1890. Se procedió a su construcción con el objetivo final de trazar la ruta del ferrocarril del aceite.
Charco del Aceite
Entre los espacios naturales villanovenses destaca el “Charco de la Pringue o Charco del Aceite”. Cuentan que el nombre de este paraje se debe a que un burro, cargado con pellejos de aceite, se precipitó por un angosto camino impregnando sus aguas. Posee un área recreativa con mesas de piedra y espacio habilitado para el aparcamiento. Es un lugar perfecto para darse un baño en verano, y disfrutar de una agradable jornada en cualquier momento del año.
Plaza de toros
De estilo neomudéjar, construida en 1928. Monumento que marca la explosión arquitectónica de los años 20 en Villanueva del Arzobispo junto a las casas señoriales.
Parque municipal y Ermita de San Blas
Fue construido en el año 1926. Posee una amplia variedad de flora y especies diferentes como pinos carrascos, cipreses, castaños, acacias, olmos, etc. Así como rosales y flores que invitan a un agradable paseo.
Aove y Gastronomía
El aceite de oliva no solo es la principal actividad económica del municipio sino que tiene mucho que ver con nuestra gastronomía.
Actualmente, cuatro grandes almazaras trabajan en la obtención del aceite de las aceitunas.
Saber más
Cooperativas aceiteras, con una producción anual de las más importantes del sector, tales como San Isidro, San Francisco, Vera-Cruz y de segundo grado como Jaencoop, que reúne el envasado, comercialización y distribución de las tres anteriores y de otras tantas más de la provincia de Jaén.
Entre nuestras variedades además del excelente aceite de oliva virgen extra, encontramos la categoría de aceites tempranos: Los Albacares, Paraíso de Bardazoso, Ermita de la Hoz, Finca de las Malezas, Damajuana, Green Sublim, Prólogo, Bikurim, Molino de Casilda y Bañón.
Nuestra cocina tiene una seña de identidad muy especial y muy saludable y en Villanueva son muy típicos los platos como ajo harina, ajo morcilla, ajoatao, andrajos, carne de ciervo, embutidos caseros –salchichón, morcilla negra, morcilla blanca, chorizo-, blanquillas, encebollao de bacalao, gachamiga, migas, pipirrana, potaje de garbanzos, etc.
Entre los dulces o postres caseros y tradicionales encontramos los borrachuelos, calostros, flor de lis, gachas dulces, papajotes, roscos de la sartén, de vino, roscos del baño, empanadillas caseras, mantecados, tortas de aceite o de manteca.
Como bebidas típicas la cuerva, licor de membrillo o de higo, mistela y el tradicional vino de San Antón.