Aýna
PUEBLOS MÁGICOS DEL CENTRO DE ESPAÑA
ALBACETE | CASTILLA-LA MANCHA
La mágica historia de Aýna
Aýna, enclavada en la comarca albaceteña de la Sierra del Segura, es uno de los parajes más sugestivos de Castilla La Mancha, localizado en los más profundo de la garganta que forma el río Mundo, es un singular y abrupto enclave natural y uno de los pueblos más pintorescos de la zona.
Todo el valle del río es una sucesión de encantadores rincones, ideales para la contemplación y el relax y esta escoltado por un grandioso paisaje de piedra especialmente atractivo para los amantes de la naturaleza más salvaje.
Debido a su especial ubicación y con el fin de aprovechar la reducida superficie disponible, los habitantes de Aýna han utilizado para diversos cultivos las terrazas excavadas en las laderas del monte.
Además del paisaje, mantiene numerosos vestigios de las diversas culturas que la han ido poblando, como las Pinturas Rupestres Paleolíticas de la Cueva del Niño, cuna del arte rupestre albaceteño, el artesonado mudéjar de la Ermita de los Remedios, los restos del Castillo de la Yedra, de origen islámico, las antiguas salinas de el Salero o las serpenteantes callejuelas que forman su casco urbano antiguo.
No debemos olvidarnos de la gran riqueza de la flora y fauna, deliciosa gastronomía, unas fiestas y encierros que son renombrados y muchas actividades turísticas y deportivas, destacando la escalada y el senderismo. Y, lo mejor de todo, el aire puro y tranquilizador de este pueblo mágico.
Aýna mantiene también singulares fiestas y tradiciones. El calendario festivo en Aýna comienza con el carnaval, desfile de disfraces y la aparición de Trompalobo y Trompalapiz; en Semana Santa, varias procesiones recuerdan la pasión de Cristo; en mayo, las fiestas del Cristo de las Cabrillas, reúne a los vecinos de este barrio en torno a su ermita; en el día del Corpus Christi, las calles amanecen tapizadas con una alfombra de mejorana, fachadas engalanadas y altares preparados para el paso de la Custodia; y llegamos a Septiembre, fiestas patronales en honor a Sta. Maria de lo Alto del 3 al 8, punto culminante del calendario y la tradición, con sus espectaculares y emocionantes encierros, verbenas nocturnas, pasacalles, peñas; más tarde el 12 de diciembre, víspera de Sta. Lucia y al anochecer, numerosas hogueras de romero iluminan el pueblo; y el año acaba con la Navidad, villancicos, higos y nueces, Belén viviente y cabalgata de Reyes.
Plaza Mayor y Ayuntamiento
Cascadas en el río Mundo
Toros y encierros de Aýna
LUGAR MÁGICO
Cueva del Niño
Situada a la orilla del río Mundo, entre los picos Halcón (1232 m.) y Albarda (1254 m.) a varios kilómetros aguas arriba de Royo Odrea, aldea de Ayna, y muy cerca del límite de término con Bogarra. Su nombre es debido a los vecinos de los caseríos cercanos (Los Luisos, El Avellano, Carbabos, San Martín, etc.) que la llamaban la “Cueva de los Niñotes” en referencia a las pinturas rupestres del paleolítico superior que alberga. Están catalogadas como las pinturas más antiguas de Castilla La Mancha y declaradas Patrimonio de la Humanidad en 1998 por la UNESCO.
Algunos lugares que tienes que conocer…
y muchos más que puedes descubrir.
Ermita de Nuestra Señora de los Remedios
Posible sinagoga judía, que paso a formar parte del legado cristiano tras la reconquista en el S. XIII, siendo a partir de entonces y hasta el año de 1953 la iglesia parroquial. Situada en la calle Mayor, su apariencia externa parece el de una casa más, pero podemos apreciar en la puerta de entrada un arco de medio punto con grandes dovelas. El elemento arquitectónico de mayor valor artístico de la ermita es la techumbre de madera de tradición mudéjar (S.XVI) que la cubre. Actualmente este espacio acoge el Centro de Interpretación “José Luis Cuerda”, dedicado al cineasta albaceteño y a la película rodada en Aýna “Amanece que no es poco”.
Iglesia de Santa María de lo Alto
Templo construido en 1953 sobre los restos del Castillo de la Yedra y la antigua ermita de la patrona, la Virgen de lo Alto. Es de destacar la torre, fabricada en piedra de sillería en el S.XVII y que pertenecía a la citada ermita, las tres campanas fechadas entre los siglos XVIII y XIX. El altar mayor presidido por la talla en madera de Santa María de lo Alto, patrona de Aýna, está decorado por pinturas al óleo realizadas por Cruz J. Calderón en el año 1963, representan la anunciación, la natividad, la coronación de Ntra. Sra. y la Santísima Trinidad, rodeado de ángeles.
Turismo Rural y Gastronomía Local
Aýna dispone de una excepcional oferta de alojamiento y restauración para disfrutar de la naturaleza, de los sabores auténticos de esta tierra antigua y de productos singulares como su aceite, la repostería tradicional donde destacan las hojuelas que se toman con miel de los montes de Aýna :”miel sobre hojuelas” y los distintos platos elaborados con Cordero Segureño, una auténtica delicia de sabor y tradición. Aýna es un destino imprescindible para los amantes del senderismo, de la escalada, rutas de montaña y todo lo que un espacio natural vivo ofrece.
Patrimonio Natural
Sin duda alguna el medio natural de Aýna es su mayor riqueza. Todo el valle es una sucesión de encantadores rincones ideales para la contemplación y el relax, es un valle escoltado por un grandioso paisaje de piedra y vegetación especialmente atractivo para los amantes de la naturaleza mas salvaje.
Siguiendo el curso del río Mundo, contemplamos unas maravillosas vistas del pueblo y descubrimos parte de su flora y fauna, podremos recorrer la fértil vega en la que se cultivan todo tipo de hortalizas y frutales con un sistema de terrazas y regadíos de origen musulmán, además de encontrar algún rincón en el río donde darnos un chapuzón.
Toda la grandeza natural de los montes y bosques que rodean Aýna la tenemos cercana. En nuestro recorrido por los montes de Aýna estaremos rodeados por el pino carrasco, que domina la mayoría del paisaje, junto con encinas, sabinas, enebros, lentisco, jaguarzo, torvisco, genistas, pino negral, plantas aromáticas como el romero, tomillo, espliego, mejorana, y otras como el esparto.
La fauna también está especialmente presente, siendo la especie más emblemática de la fauna ayniega la cabra montes, verdadera reina de las cumbres de Aýna, es fácil de hallarla en los altos paredones verticales que rodean a la población, y ha convertido ésta en una zona de protección especial para la misma.
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