Iznatoraf

PUEBLOS MÁGICOS DEL SURESTE DE ESPAÑA
JAÉN | ANDALUCÍA ORIENTAL

 La mágica historia de Iznatoraf

En el Caballón de la Loma entre el Río Guadalimar y el Guadalquivir se erige un municipio con encanto natural, pero también monumental. Calles estrechas con aroma a Andalucía, llenas de flores, macetas y verde. Iznatoraf huele a Andalucía.

Su muralla, con 5 arcos, su iglesia, nos da pié a pensar su enorme legado, de su crisol de culturas a lo largo de los siglos, desde los musulmanes hasta el cristianismo. Son sus gentes las que tienen pasión por el Cristo de la Vera Cruz, devoción por su talla, así como creencia en la ermita donde queda alojado. La Virgen de la Fuensanta protegerá a todos sus habitantes y visitantes. Iznatoraf es famoso, por su Feria Medieval, que atrae a multitud de curiosos y amantes de lo antiguo, para disfrutar de una divertida jornada, pensando en cómo se vivía en el medievo.

Naturaleza, aire puro, limpio, como es la Sierra de Iznatoraf, dentro del Parque de Cazorla, Segura y las Villas. Sus veredas, sus caminos, sus senderos, hay que caminarlos para encontrar la paz interior. ¡Que no te lo cuenten! ¡Tendrás que venir!

Calle típica

Mirador Pedras de Rome

Arco de la Calle Campo

Bica de A Pobra de Trives

Ayuntamiento

LUGAR MÁGICO

Puertas y muralla de Iznatoraf

La muralla urbana de Iznatoraf fue declarada en 1985 Bien de Interés Cultural. Conserva gran parte de sus lienzos y muchas de sus puertas.

Destacala Puerta del Arrabal, levantada en línea con la muralla. Con arco de medio punto. En su interior acoge un relieve de la Virgen enmarcado por pequeñas pilastras y cornisa.

Algunos lugares que tienes que conocer…

y muchos más que puedes descubrir.

Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción

Es muy probable que esta antigua iglesia sea la mezquita mayor de la medina musulmana que sacralizó tras la conquista el obispo Rodrigo Jiménez de Rada junto con Fernando III El Santo.

En el siglo XVI se levantó la actual iglesia cuyas obras comenzaron en 1583 y finalizaron en 1591, con añadidos que se terminaron en 1602.

Ermita del Cristo de la Veracruz

Data de los siglos XVII-XVIII. En ella se alberga la imagen del patrón, el Santísimo Cristo de la Veracruz, en un camarín de estilo barroco cuya decoración se debe al pintor Ginés Navarro.

La portada exterior data de la reconstrucción del templo que se hizo al gusto neogótico por los vecinos en el Siglo XIX.

El Arco del pozo de la nieve

Es similar en características a los de las calles del Campo y Comandante Barcina. Llegamos a través de él a un zigzagueante diseño donde estuvo la “nevera” del municipio, en la que, a base de hielo y paja, se conservaban los alimentos perecederos hasta no hace relativamente mucho tiempo (de ahí su nombre). El conocido como Pozo de la Nieve era administrado por el Ayuntamiento.

El Arco de la Virgen del Postigo

Forma un bloque unitario con el edificio del antiguo ayuntamiento y el remate almenado le da un carácter defensivo.

Pudo ser construida bien por los sanjuanistas o por los templarios entre los siglos XIII y XV. En la planta baja se encuentra la antigua cárcel.

Miradores

Iznatoraf es el mejor balcón de las Sierras de las Villas, Cazorla y Segura. No te pierdas nuestros dos miradores y enamórate de las vistas.

Torre del reloj

Se encuentra presidiendo la plaza de San Fernando. Consta de dos cuerpos, el primero es un cuerpo cuadrado en el que se aloja el reloj y sobre el un cuerpo de base octogonal.

Rematando el conjunto encontramos un cuerpo con campanas.

Cueva del Peinero

Este área se encuentra en medio de una impactante formación geológica, siendo uno de los parajes más abruptos y escarpados del Parque.

Su salida natural es la impresionante garganta por la que discurre el río Aguascebas Grande.

Gastronomía de Iznatoraf

Comparte lznatoraf su cocina tradicional con la comarca de las cuatro villas donde se halla inmersa, pero sobresalen los productos de la tradicional matanza del cerdo, siendo el llamado “ajo morcilla”, el plato que más le caracteriza. Está elaborado con la sangre del cerdo, siendo característico el que la cebolla esté frita y no cocida, llevando además arroz cocido, ajo y abundantes especias como la canela y el clavo, y con manteca de cerdo sin tropezones de grasa, lo que le da una textura más propia para untar que para embutirla.

Con Villacarrillo, Villanueva del Arzobispo y Sorihuela del Guadalimar, que junto a ella forman la llamada Comarca de las Villas, comparte también una peculiar “pipirrana” que se elabora con patatas cocidas, pimientos rojos secos y fritos que son machacados, y aceite, ajo y sal. Propio de la Semana Santa es el potaje de “garbanzos con panecillos”, donde el bacalao es sustituido por unas albóndigas sin carne hechas de masa de pan, ajo y perejil picado. Posee una forma especial de preparar el conejo en salsa que algunos foráneos llaman “tarrafeña”. Posee unos especialísimos y alabados “buñuelos de viento”, de interior hueco, que evidencian la presencia árabe en los orígenes de su cocina.

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